18 de febrero de 2007

Maxence Fermine


El maestro Leiva nos trajo a clase con el mayor misterio su último descubrimiento (sospecho que mucho anterior a lo que decía): Maxence Fermine. Este escritor francés, jovencísimo para la novela, es actualmente una de las jóvenes promesas de la literatura. Y al parecer también ha alcanzado en muy poco tiempo gran popularidad y éxito de ventas. Ya he degustado con gran placer Nieve, El apicultor y El violín negro; tengo a medias Opio.

La belleza de los cuentos (cuentos en el más bello sentido) de Maxence no es fácilmente descriptible. Sus obras son largos poemas en prosa, sus historias fantásticos y bellos relatos en los que los pequeños detalles están dotados de una belleza abrumadora.

Regala estos libros a alguien a alguien a quien quieras mucho: a tu madre, tu padre, tu hijo, tu pareja, a tí mismo... Estarás regalando poesía.

Lo peor: la extensión. Aunque perfecta y correctísima, la breve extensión de los relatos dejan a la parte más egoísta del lector esperando más.

He comprobado que en la Wikipedia en español no existía un artículo dedicado a este autor, así que la he creado y ahí queda para que el que lo crea conveniente la edite a placer...

Al final de este post y aún a riesgo de que algún defensor de los derechos de autor me lapide os dejo un extracto de Nieve que considero fantástico.


Maxence Fermine nació en Albertville en 1968, escritor francés.

Maxence Fermine pasó su infancia en Grenoble aunque más tarde viviría trece años en París. Cursó estudios en la Facultad de Letras pero los abandonó al decidir trasladarse a África.

Tras viajar por varias ciudades africanas finalmente se establece en Alta Saboya. En esta ciudad reside actualmente con su esposa y sus dos hijas.

Con una carrera literaria corta en el tiempo y con una sorprendente juventud para un escritor de novelas, Maxence Fermine ha conseguido un gran éxito de crítica. Su primera novela Nieve, que publicó a la edad de treinta y un años, le supuso desde el principio su consagración como gran promesa de la literatura contemporánea.

En su estilo se percibe la búsqueda de la pureza, la utilización inteligentísima de los recursos, la reducción y limpieza del lenguaje. Aunado esto con una fortísima sensibilidad para la belleza hace que sus hermosos cuentos se conviertan en pequeñas joyas que dejan al lector ebrio de poesía.

Se le ha comparado con Coelho y con Antoine de Saint-Exupèry. Con el primero podría parecer que comparte cierta afinidad por la elección de temas pero, mientras que en Coelho el relato se torna fábula moralizante, el fin perseguido por Fermine es la consecución de un poema en prosa que acerque al lector la más hermosa visión de la realidad. Con Exupèry comparte el gusto por la sencillez y la belleza de las pequeñas cosas.

En francés ha publicado:

* Neige (1999)
* L'Apiculteur (2000)
* Sagesses et malices de Confucius le roi sans royaume(2001)
* Le Violon noir, roman (2000)
* Opium, roman (2002)
* Billard blues et Jazz blanc poker (2003)
* Amazone (2004)
* Tango Massaï (2005)
* Le labyrinthe du temps (2006)

En español:

* Nieve, traducido en 2001
* El Apicultor, traducido en 2001
* El violín negro, traducido en 2002
* Opio, traducido en 2003





Estalla el jarro de agua
(ha helado esta noche)
Me despierta
Bashô


“-¿Qué es la poesía?-preguntó el sacerdote.
-Es el misterio inefable -contestó Yuko.

Una mañana, el ruido de la jarra de agua al estallar hace germinar en la mente una gota de poesía, despierta el alma y le transmite su belleza. Es el momento de decir lo indecible. Es el momento de viajar sin moverse. Es el momento de ser poeta.
No adornar nada. No hablar. Mirar y escribir. En pocas palabras. Diecisiete sílabas. Un haiku.

Una mañana, nos despertamos. Es el momento de retirarse del mundo para que nos sorprenda mejor.

Una mañana, nos tomamos tiempo para vernos vivir.”


14 de febrero de 2007

Hombres de armas


No creo poder añadir mucho más sobre Terry Pratchett a lo que ya comenté tras leer "Pies de Barro". "Hombres de Armas" es una novela también perteneciente a la saga de Mundodisco y en la que la protagonista vuelve a ser la Guardia de Ank-Morpork. Cronológicamente es anterior a "Pies de Barro" y en ella aparecen y maduran los personajes que van a aparecer más tarde.

Es una novela muy divertida. Con eso no descubro nada a los amantes de Terry Pratchett pero sí a los que no lo han leído aún. No creo que sea fácil prefigurarse cómo puedes llegar a divertirte leyéndole. Lleno de citas ácidas y críticas, juegos de palabras, ironías, el suyo es un humor inteligente que hará sonreír a cualquier lector despierto.

Realmente muy recomendada. Una lectura que engancha, apasiona y se disfruta.

Y ahora me marcho a cazar mariposas (que es lo que se debe hacer con ellas para que no anden por ahí aleteando y creando huracanes...)

(De nuevo gracias naranjita por la recomendación :) )

12 de febrero de 2007

Los secretos

Me dijiste que aquel texto mío te parecía como escrito por ti, ahora te diré que esto me habría gustado escribirlo yo...

"Cuando los secretos no me dejan dormir

Muchos domingos por la noche pago en sueño la pereza de levantarme a una hora más o menos decente. El lunes por la mañana madrugo para trabajar y siempre, sin fallar ni un día, acaba cogiéndome el toro del descanso en forma de película, de libro o de bitácora envuelta de humo.

No puedo dormir porque pienso en comida, a pesar de haber cenado dos veces, y me entra el hambre del que sabe que no hay nevera que la vaya a calmar.

No puedo dormir por las pequeñas cosas procrastinadas, por no hacer deporte, por seguir fumando demasiado, por el dolor de espalda, por la lágrima de sueño que se me forma en el ojo izquierdo.

No puedo dormir por no haber hecho el amor, por no hacerlo desde hace tanto tiempo, por no hacer, por no amor, por el frío intenso que se acumula en todos los sitios que no están debajo de mi edredón.

No puedo dormir por la reconstrucción permanente, por el sube y baja de cada día, por no resolver ni poner en fila las ideas, por no tener un plan más allá de la semana que viene, por la última concesión a la pereza, que es mi propio sueño.

Pero sobre todo no puedo dormir por los secretos, los dos o tres secretos que anidan en mi cabeza. Por aquello que no le conté ni a mi espejo, por dos pequeñas mentiras que giran para demostrar quien sabe qué cosa. Recuerdo aquella novia que tuve que creó un amor del pasado que incluso le escribía cartas, a pesar de que jamás salió de su propia cabeza. No puedo dormir por la mujer que tengo atravesada en los ojos, como dijo Galeano, y como dijo él también, no puedo decirle que se marche porque tengo una mujer atravesada en la garganta. No puedo dormir por quien quiere amarme y se encuentra corazas y paredes de acero, no puedo dormir por las cartas que aún no han respondido, por el anonimato, por los ojos tristes de mis amigos, por el quedar bien y por el no quedar bien. No puedo dormir por el protocolo, por el rellenar huecos de tiempo, por decir un par de verdades y no estar demasiado convencido de que sean verdad.

Pero sobre todo no puedo dormir por el secreto de aquello que hice y no cuento, de aquello que siento y no cuento, de aquello que acabo de desear y no cuento…

El lunes por la noche suelo dormir bien."

Funambule


En la mesa hay esparcida una baraja
-como en otoño repentino-.
Una desconocida intenta equilibrar las cartas.
Sonríe.
Yo tristemente observo los botes apilados en la alacena
guardando cada uno un castillo roto.

10 de febrero de 2007

Foo y Bar


;)

(Gracias nenito)

Fogonazos

El nene me recomendó hace tiempo este blog y desde entonces lo estoy visitando frecuentemente. En él se hace un buen repaso a todo tipo de curiosidades: científicas, históricas, misterios... es MUY interesante. Un gran blog por la alta calidad de sus contenidos y por su sorprendente frecuencia de actualización. Desde aquí os lo recomiendo vivamente y le doy mi enhorabuena al autor (aún no sé de dónde saca la información, es increíble)

3 de febrero de 2007

El túnel


"El túnel" es la primera novela de Ernesto Sábato, publicada en 1948 cuando el escritor contaba con 37 años de edad.

Últimamente suelo asociar íntimamente y de forma semiinconsciente un adjetivo a un libro o a un autor: de este modo Álvaro Pombo está unido para mí al adjetivo "sórdido" (he de reconocer que para mi desgracia sólo he leído "El héroe de las Mansardas de Mansard" y tengo a medias "El metro de platino iridiado", pero las asociaciones de ideas son libres aún) y es la primera palabra que me viene a la mente al pensar en él; Carver me sugiere "ominoso" y la lectura de "El túnel" me lleva inevitablemente a "tormentoso". Esa es quizá la característica más fuerte de la novela, el fragor de la batalla interior del personaje entre mil pasiones distintas.

La formación de Sábato es científica; estudió ciencias físico-matemáticas en la Universidad de la Plata y trabajó en el instituto Curie y en el MIT. Toda esta carrera científica la abandonaría en pos de su pasión: la literatura. Sin embargo, ese bagaje científico se hace notar en su forma de analizar a los personajes, las situaciones..., en su descripción quirúrjica de los procesos psicológicos a los que se ven sometidas las criaturas de su oscuro imaginario.

Es en sí mismo el escritor un ser humano atormentado, con un amplio conocimiento sobre filosofía y metafísica y afín a las corrientes existencialistas de Sartre o Kierkegaard. Él mismo se opone a la asimilación completa a esta corriente al nombrarse abanderado de su propia metafísica de la esperanza.

El túnel comienza del modo más difícil posible, como si el propio escritor se torturase de entrada con la forma de su relato:

"Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne; supongo que el proceso está en el recuerdo de todos y que no se necesitan mayores explicaciones sobre mi persona."

No hay misterio ya para el lector sobre lo que va a ocurrir, se conoce el asesino y se conoce la víctima y sin embargo, se devana de forma angustiosa toda esa maraña de decepciones, ansiedades, frustaciones e impotencias que llevan al mortal desenlace. Un ser humano atrapado en un túnel en medio de la Vida, al que por una pequeña ventana apenas asoma una persona para llenarle de falsas esperanzas -o más que esperanzas, angustía- sobre la posibilidad de llegar a ser entendido alguna vez.

El ser humano perdido en la propia y angustiosa percepción existencial de sí mismo, suplicando puentes que le acerquen a otro ser y le libren de la horrible soledad.

En apenas cien páginas se desarrolla una gran novela, una obra imprescindible de la literatura, con una fuerza monumental construida en base a la sencilla descripción -sencilla en lo formal- de los más íntimos pensamientos del protagonista.

Los médicos aconsejaron a Ernesto Sábato que abandonara la lectura y la escritura para no empeorar su enfermedad nerviosa. Del mismo modo que a Matisse le retiraron sus propios cuadros de la habitación de hospital en que se encontraba. Desde entonces se ha dedicado a la pintura; a la proyección de su creatividad usando pigmentos y texturas. Él mismo afirma que la pintura le hace bien a su espíritu.

"El túnel" es una obra esencial para la comprensión del lado más oscuro del ser humano (... de uno mismo). Muy recomendada.